Hace años, éramos un grupo de apasionados por el esquí náutico que, cruzando las sierras, entrenábamos en el Lago La Viña. Éramos familias, amigos y deportistas de Villa Dolores, unidos por la misma ilusión: crecer en el deporte que amábamos.

Con el tiempo, nuestros hijos también empezaron a soñar con deslizarse sobre el agua, a competir, a esforzarse por ser mejores. Y con sus sueños crecieron también nuestras necesidades: mejores condiciones, un espacio pensado especialmente para entrenar y evolucionar.

Así fue como nació el desafío de construir nuestro propio lago. Más de 10 años de esfuerzo, aprendizaje y perseverancia nos permitieron crear el Lago Ahumada: un espejo de agua que respeta las más altas exigencias internacionales, realizado con enorme dedicación y cumpliendo todas las normativas provinciales y nacionales.

Hoy el Lago Ahumada es mucho más que nuestro lugar de entrenamiento. Es un espacio abierto a todos los que quieran aprender, entrenar, superarse y disfrutar. Un sitio donde niños, jóvenes y adultos pueden iniciarse en el esquí náutico o presenciar competencias de nivel nacional, sudamericano e internacional.

Nuestro sueño se transformó en un lugar vivo, donde el espíritu del deporte sigue creciendo en cada ola, en cada salto y en cada sonrisa sobre el agua.
El Lago Ahumada es hoy un sueño compartido, y todos están invitados a ser parte de esta historia.